Los trabajadores afiliados al principal sindicato de Samsung Electronics en Corea del Sur irán a la huelga indefinida tras la negativa de la empresa a atender sus reivindicaciones salariales.
El Sindicato Nacional de Samsung Electronics (NSEU), con una cuota del 24% sobre una plantilla total de 125.000, ha variado su hoja de ruta después de que la huelga de tres días que debía acabar hoy y el anuncio de más paros a partir del 15 de julio no hayan surtido efecto. "No hemos hablado con la dirección desde que iniciamos la huelga el lunes", ha indicado el vicepresidente del NSEU, Lee Hyun-kuk.
Los manifestantes exigen un aumento del salario base del 3,5% y un día libre para conmemorar la fundación del sindicato. Lee ha informado de que la dirección ofreció una subida del 3%, pero desde la organización sindical reclaman un 0,5% adicional que corrija los efectos de la inflación.
Desde enero, tanto la dirección de Samsung como los sindicatos han celebrado varias rondas de conversaciones, pero no han podido acercar posturas sobre el alza salarial, el sistema de vacaciones o las primas.
En consecuencia, el pasado lunes se inició una huelga que, en su primera jornada, concentró a 6.540 trabajadores en una protesta a la entrada de las instalaciones de Samsung Electronics en Hwaseong procedentes de las plantas de Giheung, Pyeongtaek, Cheonan, Onyang, Gumi y Gwangju.
Una afluencia mayor de la esperada llevó al NSEU a asegurar que la huelga afectaría a la producción de microchips, si bien Samsung Electronics lo ha negado.
"Samsung Electronics se asegurará de que no se produzcan interrupciones en las líneas de producción. La empresa mantiene su compromiso de entablar negociaciones de buena fe con el sindicato", ha manifestado la multinacional en un comunicado.