Kruk España ha presentado el II Observatorio Kruk, un estudio periódico desarrollado por la compañía de gestión de cobro, que ha concluido que el 50% de las personas encuestadas tiene alguna deuda con bancos o entidades financieras.
Según ha constatado el estudio, realizado con la finalidad de conocer la realidad del endeudamiento de la sociedad española y el modo en que la ciudadanía se enfrenta a sus deudas, uno de cada tres ha acumulado deudas impagadas y el 36% carece de capacidad de ahorro, por lo que debe renunciar a gastos de ocio como irse de vacaciones.
A pesar, de ello, se ha observado un ligero descenso en comparación con los datos del I Observatorio Kruk, que situaba el endeudamiento en el 53% de la población.
"Esta segunda edición consolida nuestro esfuerzo por analizar de manera periódica las causas que llevan a las personas a endeudarse, las cantidades implicadas y cómo se producen los impagos", ha explicado Alina Giurgea, directora general de Kruk España.
Los resultados de esta investigación han indicado que el perfil de la persona deudora media en España se corresponde con la de un hombre mayor de 55 años que vive en el nordeste o sur del país, y que tiene una deuda media de 32.407 euros, contraída, normalmente, con un banco para hacer frente al pago de la hipoteca o el alquiler de su vivienda habitual.
PRINCIPALES CONCLUSIONES DEL ESTUDIO
Los datos del observatorio reflejan que la ciudadanía ha asumido el endeudamiento como un instrumento financiero que permite acceder a los bienes y servicios que su capacidad de ahorro no puede costear. En general, se manifiesta cierta prudencia financiera que lleva a mantener niveles de deuda asumibles, evitando la tentación de pedir más dinero del que pueden devolver.
Kruk España ha identificado cuatro tendencias en relación al endeudamiento de la población española: los níveles de adeudo se mantienen estables a pesar de la inflación; la concentración bancaria hace que se reduzcan los actores del mercado de deuda, pero abre nuevas oportunidades a entidades no bancarias como las 'fintech'; las personas endeudadas se sienten cómodas con un cierto nivel de deuda, y la mayoría las afronta sin apuros, y por último, la concienciación de los consumidores respecto a las consecuencias del endeudamiento es cada vez mayor, lo que facilita un uso responsable de los servicios de financiación.
"Gracias a la elaboración periódica de este estudio, no sólo comprendemos mejor la situación de nuestros clientes, sino que también estamos en una mejor posición para ofrecerles soluciones innovadoras que les permitan gestionar de manera más eficaz su situación financiera", ha concretado Giurgea.