NORBOLSA

Mercado: fuertes caídas en las bolsas asiáticas alimentadas por los riesgos de recesión que disparaba el informe de empleo de EE.UU. el pasado viernes, que se están viendo amplificadas por los riesgos geopolíticos y la rotación de la tecnología. Así, el yen y franco suizo y el oro servían de refugio para los inversores, mientras en deuda continuaba el rally, con el mercado disparando las expectativas de bajadas por parte de la Reserva Federal y viendo necesarios movimientos de 50pb en las primeras rebajas. Así, los datos macro cobran particular relevancia en este momento, con el foco hoy en la publicación del ISM y el PMI de Servicios.

EE. UU. – macro: la creación de empleo durante el mes de julio ralentizaba agudamente, muy por debajo a expectativas (114.000 vs 175.000) y el registro de junio era revisado a la baja en -27.000 a 179.000. A su vez, se esperaba que la tasa de desempleo se mantuviese estable y repuntaba +0,2pp a +4,3%. La debilidad de los registros de empleo, en conjunción con otras lecturas de poco brío que conocíamos durante la semana pasada (repunte peticiones de subsidio por desempleo, caída del gasto en construcción y depresión registro manufacturo ISM), provocan fuerte rally en la calidad ante y los futuros de la FED aceleran el ritmo y la agresividad en la normalización de política monetaria, descontando para septiembre una bajada de 50pb.

Alemania – macro: la economía de Alemania puede estar debilitada, pero los hogares son optimistas. El sentimiento está cerca del nivel de febrero de 2022 antes de la caída de la guerra en Ucrania. Ese desajuste quedaba en evidencia el martes cuando se revelaba que el país era el único gran miembro del área monetaria que había sufrido una caída de la producción durante el 2T. Los datos de la encuesta de julio mostraban otra mejora en la confianza del consumidor alemán que está ahora apenas por debajo del nivel que tenía en febrero de 2022, cuando se produjo una caída después de la invasión rusa de Ucrania. La confluencia entre el aumento de los salarios y el debilitamiento de las presiones inflacionarias ha sido marcada. En el primer trimestre de 2024, los trabajadores alemanes experimentaron un aumento histórico del salario real debido a las presiones inflacionarias que comenzaron en 2008. GfK, cuyo propio índice de clima de consumo mostró el mes pasado un repunte también en Alemania, ve mejores perspectivas de ingresos y un poder adquisitivo ligeramente más brillante como factores clave de una mejora en la confianza.

Geopolítica: el Secretario de Estado estadounidense Bliken advierte a sus homólogos del G-7 que la respuesta de Irán sobre Israel puede ser inmediata, dando un horizonte de 24-48 horas. En los últimos días, tras los atentados contra lideres de Hezbollah y Hamas, el riesgo geopolítico sigue escalando y no ayuda a recuperar confianza en el mercado. El petróleo que se toma como uno de los termómetros de impacto en mercado se está viendo sometido por el riesgo de recesión que ha empezado a cotizar el mercado tras el informe de empleo del viernes en EE.UU.

Tecnología: al fuerte sell off que estamos viendo en tecnología, causado por la rotación de mercado y por la falta de nuevos catalizadores desde los resultados, se ampliaba con las noticias del fin de semana de Bershire confirmando que durante el 2T ha vendido la mitad de su posición en Apple.

China-macro: el PMI Caixin de Servicios se comporta mejor de lo esperado, consiguiendo mejorar hasta 52,1 frente al 51,2 del mes de junio. La mejora viene sobre todo del componente de nuevos pedidos, a pesar de que la demanda externa sigue sometida.

Petróleo: el barril de petróleo caía a mínimos de 8 meses, ya que el temor a una recesión en EE. UU. tras los malos datos macro de la semana pasada, contrarrestaba la preocupación sobre las tensiones en Oriente Medio.

Asia: los principales mercados asiáticos cerraban la primera sesión de la semana con un comportamiento a la baja, debido a los temores de que EE. UU. podría dirigirse a una recesión. En cuanto a divisas, el dólar perdía otro 2,2% frente al yen japonés, mientras que el euro se hundía un 1,9%. El índice más amplio de MSCI de acciones de Asia-Pacífico fuera de Japón perdía un 4,2%. Al cierre, el Hang Seng caía un 2,65%, el Kospi descendía un 8,78% y el Nikkei se desplomaba un 12,4%, alcanzado un mínimo de siete meses, una escala de pérdidas no vista desde la crisis financiera mundial de 2011.

Wall Street: en la sesión del lunes, el Dow Jones cayó un 1,51%, el S&P 500 perdió un 1,84% y el Nasdaq perdió un 2,43%; debido a la presión bajista que generan las expectativas de que ocurra una recesión. En cuanto a los sectores, el de productos básicos de consumo, el de utilities y el inmobiliario fueron los únicos que avanzaron. Por el contrario, el sector discrecional de consumo fue el más débil. En el plano corporativo, a la presión bajista se sumaron las caídas de Amazon, un 8,79%, e Intel, que se desplomó un 26,06% después de publicar sus resultados trimestrales y las decepcionantes previsiones. Por otro lado, Apple subió un 0,69% tras publicar unas ventas de iPhone en el tercer trimestre mejores de lo esperado y pronosticar más ganancias, apostando por la IA para atraer compradores.

Datos macro EEUU, dato de empleo peor de lo esperado con la creación en 114.000 vs los 175.000esperados.

Resultados trimestrales tanto en Europa como en EEUU, destacando las publicaciones de Apple, Amazon o Intel con comportamientos mixtos.

Reunión de la FED sin cambios, pero con puertas abiertas a una primera bajada en septiembre